martes, 13 de diciembre de 2022

Antonio Rincón Muñiz

 
Antonio Rincón Muñiz. Fotografía tomada de su página en facebook.
 
Originario de los Palacios y Villafranca, Sevilla, de 1942, aunque reside y trabaja como médico desde 1975 en Mairena del Alcor. Algunos de sus libros son: Raíces Flamencas de Mairena del Alcor (1983), Alconchel o la fuerza de lo jondo (1989), La raíz del grito (2005), Que pase el siguiente (reflexiones y anécdotas de un médico rural) (Sociedad "Nicolás Monardes", 2010), Vientos de ayer, memoria de un pueblo (2014), la novela Una herida en el tiempo (2020) y Cuentos pendientes (Pangea, 2022). Participa como letrista en algunas grabaciones: La misma senda (Pasarela, 1987) y Contra viento y marea (Cambayá Records, 1992). 

Ha recibido numerosos premios de letras flamencas:

Asociación Andaluza Hijos de Almáchar:

1988: primer premio, y premio a la mejor seguiriya. Se había incluido una malagueña; ahora unas seguiriyas:

    A qué tanto orgullo
    y tanto desprecio;
    si en este mundo, otras fortalezas
    más grandes cayeron.

    Estos malos vientos
    que azotan mi tierra;
    la están dejando, que no la conoce
    ni quien la pariera.

    Mi pare e mi alma
    me dijo al morí;
    hazme un hoyito, debajo la parra
    y entiérrame allí.

    Yo no pueo viví
    lejos de mi tierra;
    que eso es lo mismo, que estar condenao
    a una muerte lenta.

1990: segundo premio. Una soleá:

Mira que a mí no me engañas
que yo conozco tu paño,
de día los zapatos limpios,
de noche llenos de barro.

2002: primer premio, y mejor seguiriya y malagueña.

La pena que tengo
que pena más mala
de noche y día, me anda royendo,
las mías'entrañas.

Soñaba contigo
y me desperté
porque en el sueño, la que yo besaba
era otra mujé.

Ni ruegos ni llantos
de na me valieron
me condenaron, y pagué en presidio
lo que otros hicieron.

Yo voy poco a poco
juntando mis penas
como el que junta, granito a granito
un montón de arena.

Como una velita
que se va apagando
se me murió, mi mare e mi alma
dormía en mis brazos.

La casa aonde vivo
me la tiró el viento
que no tenía, como tu queré,
firme los cimientos.

De toas las mujeres
que yo he conocío
a nadie quise, como a ti te quiero
con tos mis sentíos.

    (seguiriyas)


Un río de sentimientos
va corriendo por mis venas
cuando canto por derecho
un cante por malagueñas
que me sale de aquí adentro.

La Trini cuando cantaba
lloraba de sentimiento.
La pena que la mataba
más que un cante era un lamento
por eso tanto gustaba.

A las puertas de la muerte
la acompañé en su agonía,
abrió los ojos al verme
y sin hablá me decía
que me había querío siempre.

Mi mare se me moría
y le prometí olviarte.
Conforme pasan los días
la promesa va a costarme
si es que la cumplo, la vía.

En la fuente del queré
me puse a beber un día,
no se me quitó la sed
porque mientras más bebía
más me apetecía bebé.

Fue tu querer flor de un día
qué poquito me duró,
como una llama encendía
que el viento me la apagó
dejando a oscuras mi vía.

    (malagueñas)

2006: segundo premio.

    En un cuartito los dos
    bebí el licor de tus labios
    y me emborraché de amor.

    Cuando sola tú te veas
    ven a mí que aonde hubo fuego
    siempre un rescoldito quea.

    Me lo jugué a una partía
    tu corazón contra el mío...
    Por poco pierdo la vía.

    Yo te quisiera abrazá
    pero estás como la rosa
    de espinitas rodeá.

    Tú sabes que no es igual
    un beso de compromiso
    que llegar hasta el final.

    Me faltó la voluntá
    para decirte en la cara
    que es mentira tu verdá.

    Yo quería mucho más
    pero con verte y no hablarte
    me tuve que conformá.

    (bulerías)

Festival del Cante de las Minas de la Unión (todas las letra premiadas se han incluido ya):

2002: otras letras, con unas malagueñas.

2003: mineras.

Premio de letras flamencas Antonio Fosforito:

2001: primer premio.

Premio de letras Francisco Moreno Galván:

2009: tercer premio. Unas alegrías:

    Más sal que las salineras,
    mi niña va derramando
    cuando va por la ribera
    desde Cái a San Fernando.

    Por la noche y el día
    te sueño yo,
    y soñando suspira
    mi corazón.

    Abre puertas y ventanas
    que entre el sol de la Bahía,
    se ven las cosas más claras
    a la luz del nuevo día.

    Al caer de la tarde
    sopla una brisa
    que levanta el vestío
    de las mocitas.

    A la marea que va y viene,
    sin descanso noche y día,
    le está cantando la luna
    un cante por alegrías.

    (Remate)

    A donde quiera que vayas
    siempre contigo estaré
    y en mi velero de caña
    junto a ti navegaré.
    
    Yo te quiero hasta el morí
    y si tú me lo pidieras
    la vida daría por ti.

Bienal de Arte Flamenco de Sevilla de 1980, dos letras seleccionadas para publicar:

    Sangre de mis venas
    tengo removida,
    que las fatigas que yo estoy pasando
    no las merecía.

    (seguiriya)

Te crees en la obligación
de llevarme la contraria
aunque no lleves razón.

(soleá)

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